Cierro los ojos y te dibujo de memoria,
Te he estudiado tanto, que resulta fácil hacerlo.
Tu cabello, esos rizos indomables que siempre intentas ocultar con una gorra.
Tus cejas tienen esa forma desprolija y ordenada tan particular,
que sería muy sencillo reconocerlas al tacto.
Tus ojos son tan intensos que podría haber un mundo oculto en ellos.
Tu nariz es perfecta, parece de ensueño.
Tus labios, tan suaves, hechos con retazos de nubes.
Tu sonrisa, es tu mejor arma, tan sincera y calma.
Tu pecho, mi refugio por excelencia.
Tus brazos, la mejor ayuda para mantener el calor.
Tus manos, ásperas y cálidas, elegantes herramientas.
Tus piernas, largas y fuertes, parece que nunca descansan.
Tus pies, firmes y decididos que permanecen andando.
He comenzado a creer en que existe un creador, porque sino no podría explicarme de donde ha salido un criatura tan hermosa como Ud.
Nunca pensé que podría deleitarme excesivamente en la belleza de alguien, pero has cambiado tantas cosas en mi, que no me extrañaría que pronto comience a ceder ante mi.
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